A todos nos ha pasado: luego de volver de una extenuante expedición, lanzamos nuestra mochila y todo nuestro equipo y los dejamos ahí durante días. Bastante comprensible si pensamos que muchas veces hemos estado lejos de casa durante mucho tiempo y el agotamiento es evidente. Pero estos días que pasa nuestra bolsa de hidratación allí la vuelven perfecta para la creación de microorganismos, bacterias, malos olores y malos sabores. Para ello, te recomendamos seguir los siguientes pasos para limpiar la bolsa de hidratación, método que sirve tanto para bolsas de abertura amplia como de tapa rosca:

1. Escurrir totalmente cualquier tipo de líquido que se encuentre al interior de la bolsa
2. Utilizando un lavalozas (preferentemente de limón, para eliminar olores indeseados) y un cepillo para biberones, restriega  y limpia el interior de la bolsa de hidratación.
3. Si utilizaste una bebida azucarada en la bolsa, usa agua tibia y jabón líquido, dejando remojar antes de limpiar con el cepillo.
4. Dejar que escurra completamente el líquido. Si la bolsa es de apertura ancha, introduce una toalla o una servilleta para secar con mayor facilidad.
5. Para los tubos no usaremos ningún tipo de jabón, solamente cepillo y agua caliente.

Para mantener en buen estado el sistema de hidratación, te recomendamos lo siguiente:

• Cuando no estés utilizándola, guarda la bolsa de hidratación en el refrigerador, para evitar malos olores y bacterias.
• No cualquier tipo de bebida es adecuada para la bolsa de hidratación. Lo más recomendable es el agua isotónica o simplemente agua, pero consulta el manual de tu bolsa para saber qué líquidos puedes portar contigo.
• Existen otras alternativas para limpiar la bolsa, por ejemplo, adquirir tabletas de limpieza especializadas, que puedes encontrar en el mercado por un precio no muy elevado.

Esperamos que te haya servido!

Escrito originalmente para Revista Azimut

Fuente: www.revistaazimut.com