Salir de aventuras con tu mascota puede ser una experiencia enriquecedora y muy gratificante sobre todo si eres de aquellos que aman los animales. Pero también requiere un esfuerzo adicional, tanto antes como durante y después de la salida.
Ten en cuenta que tu canina compañía podría verse herida en el camino, o sufrir de deshidratación, cansancio fatiga, o cualquier problema físico tal como cualquiera de nosotros, con la única excepción que ellos no podrán hablarte para decirte qué les pasa.
Así que aquí te dejamos unos cuantos consejos para que disfrutes sin mayores complicaciones tu aventura junto a tu perro
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Antes de salir
- Elige un lugar acorde a las habilidades y limitaciones de tu perro: Ojalá conozcas de antemano el terreno, para prevenir problemas del camino. Lo aconsejable sería que primero hicieras el recorrido tú, y luego lo repitas acompañado de tu can. Así, sabrás cuánto queda de camino, cuando es mejor detenerte, y cuando puedes exigirle un poco más al animal. Si es la primera vez que sacas a tu perro a una expedición de esta clase, prueba con caminos cortos y sin mucha dificultad, para ir tanteando cómo tu mascota se va desenvolviendo y cuándo parar. También considera la altitud del lugar, así como la inclinación del camino. Si tu mascota se cansa rápidamente, jadea demasiado, no muestra interés por agua o comida, o vomita, son señales de que la altura está afectándolos. Ojo con eso.
- Fíjate en las condiciones climáticas: ¿Cómo estará el día? ¿Qué temperatura será la ideal para un perro? Ellos no tienen la habilidad de sudar y enfriarse como lo hacemos las personas. Si las temperaturas son demasiado cálidas para ti, lo son mucho más para tu perro. Elige los caminos por las sombras, o cerca de riachuelos o alguna fuente de agua, para que se refresque y también pueda mojar sus patas.
- Recuerda ajustar bien el collar y colgar una identificación: No dejes que el collar apriete mucho el cuello de tu perro, dale libertad para que lo pueda portar cómodamente. La identificación es importante, pues los animales no reaccionan de la misma forma que nosotros, y tu mascota podría asustarse y correr hasta perderse, o simplemente jugando alejarse demasiado de ti. No podemos tener control absoluto sobre nuestro perro, así que mejor asegurarnos. Incluye un número de contacto o dirección en la identificación.
- Lleva suficiente agua y comida: Considera siempre una cantidad apropiada de agua y alimentos. Lleva más de lo que tu creas que va a comer o tomar, asegúrate. A medida que vayan avanzando, dale periódicamente agua y comida, para que vaya recuperando fuerzas constantemente.
- Lleva un botiquín adecuado: Las heridas que puede sufrir tu mascota allá fuera pueden parecer superficiales, pero debes cuidarlas igualmente. Infórmate sobre primeros auxilios caninos, y lleva contigo los elementos que te servirán en caso de que algo ande mal.
- Recuerda mantener a tu perro con sus vacunas al día: En salidas a lugares en que tu can puede encontrarse con otros animales, podría eventualmente contagiarse de rabia o alguna otra enfermedad. Protégelo vacunándolo periódicamente.
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Durante el viaje
- Atento a cada camino: Todos amamos ver como nuestros perros corren felices por un camino, pero no todos son seguros para éstos. Si encuentras un sendero en que haya un letrero de “lleva amarrado a tu perro” lo mejor sería que lo hicieras. Mejor prevenir que curar, y muchos parques tienen guardias que podrían complicar tu visita si no llevas amarrado a tu can.
- Empatía con los otros senderistas: No porque tu perro sea muy amigable con las personas, otras personas necesariamente lo quieran corriendo cerca de ellos. Muchas personas tienen miedo a los animales, y también debes respetar sus decisiones. Dejar a tu perro en libertad es fantástico, pero también debes mantenerlo en calma cuando otros vayan pasando.
- Siempre lleva una bolsa para desechos: Está de más decirlo. Es nuestro deber no dejar rastro alguno de nuestro paso por la naturaleza. Y los deshechos de tu animal no son una excepción. Si bien nos puede parecer desagradable, vale la pena con tal de mantener intacto el santuario natural en que nos encontremos.
- Mantente alejado de los senderos con muchos arbustos: Además de evitar heridas que puedan hacerse al animal por espinas que éstos puedan tener, algunos arbustos pueden producir reacciones alérgicas en los perros, o incluso alguna sorpresa como una culebra!
- Fíjate en grietas y terrenos rocosos: Constantemente fíjate en el caminar de tu perro, y si puedes revisa sus patas. Ellos pueden caminar largas distancias sin quejarse, sin mostrar ninguna señal externa de su incomodidad. De forma que cuando pares para tomar agua y comer, revisa si presentan llagas o heridas. Sus patas deben permanecer ásperas y al ser revisadas el perro no debería mostrar signos de molestias.
- Mantén un ritmo continuo y con pausas periódicas: Parar para recuperar energías es un paso fundamental para el desemepeño y la salud de tu perro, y también de ti.
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Después del recorrido:
- Revisa a tu perro en busca de garrapatas u otros ácaros: puede parecer exagerado pero muchos animales pueden contagiarse de ácaros en una salida al aire libre, especialmente si es un lugar frecuentado por muchos otros animales silvestres. Lleva siempre un peine para quitar pulgas y otros insectos molestos.
- Revisa las patas: busca heridas o astillas que puedan encontrarse en la base de las patitas de tu perro, si no lo haces éstas podrían molestar a tu can durante días o incluso semanas.
Ahora estás listo para irte de aventuras con el mejor amigo del hombre! Que lo disfrutes!